N° Expediente: 177/20


Clase de Expediente: Nota

Título / Síntesis: Poniendo en conocimiento del H.C.D. la posibilidad de incorporar a los Establecimientos Educacionales la bandera de los Pueblos Originarios (WIPHALA).-

Autor Particular - (Centro de Estudiantes Zárate)

Fecha de Ingreso: 2020-10-14

Estado del Expediente: Pasado a Comisión

CORRESPONDE A EXPEDIENTE DEL CONCEJO DELIBERANTE N° 177/2.020.

 

 

Zárate, 14 de octubre de 2020

  

Honorable Concejo Deliberante del Partido de Zárate

Sr. Presidente

Ariel Ríos

S     /     D

 

Como  alumnos y alumnas e integrantes de los Centros de Estudiantes de las EES N° 6  y EES N° 11 de la ciudad de Zárate, junto a la UdCE (Federación de Centros de Estudiantes), entre otros, estamos convencidos/as que es necesario que todas las instituciones educativas incorporen dentro de sus Banderas de Ceremonias a la bandera de los Pueblos Originarios denominada WIPHALA como parte de los símbolos de nuestra Nación, siendo adoptada por las etnias del territorio, hasta tanto un Congreso Indigenista defina una Bandera Indígena Argentina, que represente las comunidades aborígenes que habitan el suelo argentino.

El Estado argentino tiene una deuda histórica con los pueblos originarios que continúa caprichosamente invisibilizado sobre nuestra vida y cultura, siendo que a lo largo de nuestra  historia su participación  fue decisiva peleando activamente durante todo el proceso independentista;  los/as ranqueles en  las invasiones inglesas, los/las pehuenches y mapuches junto a San Martín en el cruce de los Andes, los/las guaraníes, chanas y otros pueblos de las costas  junto a Artigas, como así también aymaras, coyas y diaguitas en el ejército del Norte dirigido por el general Belgrano luchando junto a  hombres y mujeres afrodescendientes. Tampoco podemos olvidarnos de, nuestra historia reciente, a los cientos de jóvenes de diferentes etnias que fueron convertidos en soldados que lucharon en la guerra de Malvinas, ellos provenían de las clases más bajas y populares del país de clara ascendencia indígena; muchos de ellos no volvieron. Y lo más desgarrador, un número no establecido aún, de desaparecidos a lo largo del territorio argentino pertenecientes a comunidades originarias, militantes sociales a manos de la dictadura cívico militar. Esto expone la verdad de los pueblos que resisten. Debemos reconocer/los en el movimiento indígena, tanto por su relevancia en la identidad nacional como en su poder de resistencia en más de 500 años.

Pensemos que hubiera sido de la Argentina si todos los pueblos indígenas que fueron aniquilados por la conquista hispánica primero y por el Estado argentino después, estuvieran hoy con nosotros. Sería maravilloso contar con la presencia de estos pueblos extraordinarios, con grandes cosmovisiones y realizaciones admirables en todos los órdenes.

Estudios realizados en la UBA mediante el análisis de una base de ADN, demuestran que el 56 % de los argentinos tiene ascendencia indígena, por lo que se puede afirmar científicamente que la mayoría de la población argentina desciende de los pueblos originarios.  Es por todo esto que "Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos originarios argentinos", como expresa textualmente la Constitución, implica considerarlos oficialmente como pueblos dentro de la Nación Argentina, con identidad propia y con derechos colectivos que se derivan de su presencia histórica y contemporánea.  Se abre así para toda la sociedad civil y para el Estado el desafío de construir una nueva relación con estos pueblos, a partir de la revisión de la historia y de la profundización de la democracia basada en una igualdad que no exige uniformidad, sino, al contrario, respeto a la diversidad.

Los pueblos originarios, en la Argentina, no simbolizan un monumento al pasado, constituyen un presente fuerte y con mucha vida futura. A pesar de las situaciones adversas y realidades que hoy padecen. Recuperar nuestras raíces, respetar y valorar el rico legado cultural que los pueblos indígenas nos regalan, contribuir desde nuestros diversos lugares para que los derechos establecidos para los aborígenes en la Constitución Nacional y los convenios internacionales sean plenamente respetados, son el camino hacia una democracia auténtica y efectiva para todos los habitantes de nuestro país.

Las banderas son símbolos que transmiten valores para crear identidades. Desde el nivel Inicial, primer espacio de la educación formal, se da comienzo a la construcción de una mirada histórica inclusiva, y es donde la incorporación de la bandera Whipala como parte de los símbolos de nuestra Nación permitirá promover fundamentalmente el diálogo intercultural, desde el reconocimiento de la diversidad y de los derechos de los pueblos originarios, los desafíos a los que se enfrenta la interculturalidad entendida como herramienta de emancipación.

La Wiphala es un símbolo sagrado que identifica el sistema comunitario basado en la equidad, la igualdad, la armonía, la solidaridad y la reciprocidad.

Considerando a la Ley Provincial Nº 11.331 en la cual la Provincia de Buenos Aires adhiere al contenido y alcance de la Ley Nacional Nº 23.302, Ley sobre política indígena y apoyo a las comunidades aborígenes:

Proponemos que la Municipalidad de Zárate disponga a partir de una promulgación de ordenanza, que todas las instituciones educativas públicas y privadas, organizaciones de derechos humanos, partidos políticos, y sindicatos, incorporen dentro de sus Banderas de Ceremonias a la bandera de los Pueblos Originarios denominada WIPHALA como parte de los símbolos de nuestra Nación y revindiquen la problemática de estos dentro de sus plataformas.

Descripción y simbología y representación cotidiana:

I. La Wiphala consta de cuarenta y nueve (49) cuadrados repartidos en siete (7) columnas por siete (7) filas y contiene siete (7) colores, con la diagonal central de color blanco de forma descendente de izquierda a derecha, de la siguiente forma:

II. La secuencia de colores de forma diagonal descendente, desde el primer cuadrado superior derecho tiene el siguiente orden:

-        Un (1) cuadrado de color verde,

-        Dos (2) cuadrados azules,

-        Tres (3) cuadrados de color violeta,

-        Cuatro (4) cuadrados de color rojo,

-        Cinco (5) cuadrados de color naranja,

-        Seis (6) cuadrados de color amarillo,

-        Siete (7) cuadrados de color blanco,

-        Seis (6) cuadrados de color verde,

-        Cinco (5) cuadrados de color azul,

-        Cuatro (4) cuadrados de color violeta,

-        Tres (3) cuadrados de color rojo,

-        Dos (2) cuadrados de color naranja, y

-        Un (1) cuadrado de color amarillo.

 

III. La Wiphala es un símbolo sagrado que identifica el sistema comunitario basado en la equidad, la igualdad, la armonía, la solidaridad y la reciprocidad.

IV. Los colores de la Wiphala tienen la siguiente significación:

-        ROJO: representa al Planeta Tierra, es la expresión del hombre en el desarrollo intelectual, es la filosofía cósmica en el pensamiento y conocimiento de los sabios. Todo el mundo material visible.

-        NARANJA: representa la sociedad y la cultura; también expresa la conservación y procreación de la especie humana, considerada como la más preciada riqueza patrimonial. Es la salud y la medicina, la formación y la educación, la práctica cultural de la juventud dinámica.

-        AMARILLO: representa la energía y la fuerza, la reciprocidad y complementariedad. Es la expresión de los principios morales del hombre. Es la dualidad hombre mujer, son las leyes y normas, la práctica colectivista de solidaridad humana.

-        BLANCO: representa al tiempo y la dialéctica; la historia cíclica. Es el desarrollo de la ciencia y la tecnología, el arte, el trabajo intelectual y manual que genera la reciprocidad y armonía dentro de la estructura comunitaria.

-        VERDE: representa la economía y la producción. Simboliza a las riquezas naturales, la flora y la fauna, los recursos hidrológicos y minerales, a la tierra y al territorio.

-        AZUL: representa al espacio, la energía cósmica, al infinito, al espíritu que anima todo.

-        VIOLETA: representa a la política y la ideología social y comunitaria, el Estado como una instancia superior. La estructura de poder; las organizaciones sociales, económicas y culturales y la administración del pueblo y la Nación.

V. Representación Cotidiana: Realizar el izado de la Bandera Wiphala diariamente en los establecimientos educativos, públicos, privados, junto a los Emblemas Nacional y Provincial, previa construcción de los terceros mástiles.

Proponemos también que la Municipalidad de Zárate disponga la formación de una Comisión Ad honorem, compuesta de distintas etnias, para la conmemoración de las fechas significativas de nuestra historia.

Como ciudadanos, debemos plantar las semillas que contribuyan a la defensa de los legítimos derechos de los pueblos indígenas y al respeto por su historia, que no es otra cosa que el respeto por nosotros mismos.

Las luchas que no tienen rostros se desdibujan en el torbellino de las injusticias cotidianas.

 

 

Daniela Alejandra Velázquez

DNI 24459118

Roca 847 - Zárate

03487 15 565480